“Un clásico” de los bares de Almería cierra: expropiado para hacer una avenida

Su especialidad es la brasa y, para muchos almerienses, es casi una obligación de las noches de verano. Frente al mar y con una gran terraza (y aparcamiento), este bar es una de las mejores opciones para quienes pasan el día en la playa en la zona de Nueva Almería. Pero su vida está llegando al final: Los Charros cierra.

Al final del Paseo Marítimo (o, mejor dicho, a la altura del inicio de la ampliación que aún espera a ser inaugurada), Los Charros vive sus últimas semanas sirviendo a almerienses y turistas sus especialidades de carne a la brasa en un entorno privilegiado. 

El motivo del cierre no se encuentra en la caja registradora, precisamente. A pesar de que conseguir una mesa en el bar es realmente complicado en época estival, la propiedad de Los Charros se ve obligada a bajar la persiana de forma definitiva: la ciudad de Almería crece y, en esta ocasión, el precio a pagar pasa por perder un bar que, en plataformas como TripAdvisor, es considerado como "un clásico" por los propios usuarios.

Expropiación

A principios del pasado mes de junio, se anunciaba desde el Ayuntamiento de Almería un nuevo e importante paso para el desarrollo de la Vega de Acá: si hace unos meses comenzaban las obras en los suelos que ocupan desde La Goleta hasta casi Nueva Almería, a comienzos de junio se le daba el visto bueno al desarrollo del sector SUP-ACA-09, una zona que se encuentra entre un futuro vial que prolongará la Avenida Adolfo Suárez y que llega hasta la Avenida Cabo de Gata.

El proyecto contempla un total de 10 meses para la ejecución de las obras, una vez que se realice la aprobación definitiva del proyecto de urbanización, y cuenta con un presupuesto de ejecución que asciende a los 6.679.040,26 euros. 

Todo, para urbanizar una zona que albergará un total de 891 viviendas, de las que 204 serán unifamiliares y las 687 restantes serán de tipo plurifamiliar.

Si bien la amplia mayoría del sector es, a día de hoy, vega, en su parte sur (ya en la Avenida Cabo de Gata), hay una construcción que tendrá que ser expropiada y demolida. Efectivamente: Los Charros es ese pequeño edificio que ocupa parte del suelo que será, en un futuro, una nueva zona de Almería.

De hecho, tal y como está previsto en el proyecto, la zona en la que la clientela de Los Charros come hoy alitas de pollo será, en un futuro no muy lejano, una avenida. 

Tal y como cuentan desde el propio bar, aún no está muy clara la fecha definitiva del cierre, aunque muy probablemente sea a partir del próximo mes de septiembre cuando se sirvan las últimas piezas de carne a la brasa. De lo que sí se habla ya es de la fiesta de despedida de este bar almeriense que cierra para siempre, como consecuencia del crecimiento de la ciudad.

Y lo cierto es que el cierre no es una sorpresa (aunque no por saberlo antes resulte menos doloroso para la clientela). No en vano, con el desarrollo de este sector se sigue, simple y llanamente, lo recogido en el Plan General de Ordenación Urbana del año 1998 y que ha cambiado totalmente la situación de unos suelos que estaban destinados a uso agrícola.