La última moda es ‘El legado de Tibu’

Un viral que ha puesto en remojo a centenares de almerienses en playas, puertos y hasta fuentes

Captura de un vídeo grabado en Almería.x,auto,a
Captura de un vídeo grabado en Almería.x,auto,a
Luis F. Bonilla
23:58 • 29 jun. 2014

Se conoce como ‘vídeo viral’ a  un fenómeno de Internet que consiste en la creación de un contenido audiovisual y su posterior propagación entre los usuarios de la red a través de las redes sociales.




Una de las modas digitales e este verano es algo llamado ‘El legado de Tibu’. El asunto consiste en grabar un vídeo mientras se moja de alguna manera estando vestido. Y sí, de cualquier manera porque, si bien es cierto que en su origen la gente se lanzaba al mar o a una piscina, las últimas versiones más originales de el legado utilizan métodos muy diferentes para empaparse en agua.




Hasta aquí parece un absurdo más de Internet. La popularidad del tema consiste en que justo antes de bañarse, el protagonista “nomina” a tres amigos con la intención de que repitan la experiencia en menos de 48 horas o tendrán que pagar una mariscada al propietario del vídeo.




Lo divertido de muchas situaciones y las ganas de la gente de ser invitados a una buena comilona han hecho que prácticamente cualquiera que sea usuario de una red social ya haya visto o, incluso, esté involucrado en alguna de las versiones de ‘El legado de Tibu’.

El origen
¿Y quién es el famoso Tibu? El primer vídeo que proponía este reto fue creado por un grupo de amigos gallegos, en concreto por Damián Pereira, alias ‘El Tiburón’.




La naturaleza viajera de todo lo que tenga que ver con Galicia ha hecho ya que toda España se haya contagiado con la fiebre de este viral, que empieza a traspasar fronteras.




Almería, como no podía ser de otra manera, también se ha contagiado por el legado y existen grabaciones de lo más variopintas. Desde la playa del Zapillo hasta valientes que se atreven a lanzarse a las aguas del Puerto Deportivo de Aguadulce o (como en la imagen), algunos que optan por refrescarse con un colchón hinchable en la fuente del Obelisco de La Rambla de la capital almeriense.




Si aún alguien quiere ganarse una mariscada a costa de algún incauto todavía está a tiempo. Tiene que darse prisa porque estas modas pasan rápido y caen en el olvido con facilidad. A un viral lo sustituirá otro y así, según parece, hasta el fin de Internet.




“La clave es que causen emoción”


Ramón Jacas es uno de los hombres clav e de Libera Digital, una empresa almeriense especializada en dar servicio y formación a empresas sobre el uso de redes sociales. Uno de los aspectos que han estudiado a fondo es el de las campañas que hacen las grandes empresas usando la estrategia de lo viral, “hay marcas como Coca-Cola que lo hacen casi a diario”, afirma.


Jacas considera que uno de los aspectos claves en en éxito de algo así es “que cause una emoción, ya sea positiva o negativa”. Por otro lado, el factor definitivo para que los virales se hayan abierto paso de esta manera es la posibilidad de que se expandan con mayor velocidad: “de algún modo, las redes sociales hacen que se detenga el espacio y el tiempo para ayudar a su difusión”.



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