El malestar en el seno de los facultativos ante las consecuencias que puede traer consigo la culminación de la integración en el SAS del Hospital Universitario de Poniente con su catalogación como centro de nivel III se sigue haciendo patente por diferentes vías.
Y es que a la ‘voz de alarma’ puesta sobre la mesa por parte del Sindicato Médico y las reticencias y temores expresadas también por parte del sindicato provincial de Sanidad de Comisiones Obreras a través de notas de prensa y denuncias públicas, ahora se ha sumado un escrito remitido por médicos del centro y una carta rubricada por el área de Neumología, una de las ‘damnificadas’ por los ajustes, expresando su malestar ante lo que está ocurriendo y su temor ante lo que se avecina.
Consecuencias
El escrito remitido por un nutrido grupo de doctores hace mucho hincapié en el hecho de que el Hospital Universitario de Poniente sea catalogado como Comarcal (Nivel III) en lugar de Hospital de Especialidades (Nivel II), que es lo que entienden que es ahora mismo el centro y que era lo que esperaban tras anunciarse la integración en el SAS. Y se andan sin paños calientes: “La disminución de nivel implica la pérdida de actividades incluidas en la cartera de servicios, de manera que los pacientes que precisen esas coberturas deberán ser derivados al hospital de Torrecárdenas, con lo que la sobrecarga crónica de ese hospital solo va a empeorar, afectando a todos los pacientes de la provincia que solo podrán ser atendidos allí”, aseguran.
Asimismo, añaden que “la disminución de nivel del hospital de Poniente va a suponer que, de un plumazo, muchos de los servicios que ahora presta dejen de estar disponibles. Han sido casi treinta años de luchar por más nivel y más inversión para que el hospital de Poniente crezca y ofrezca cada vez más coberturas a la población, y ahora gran parte de lo logrado se tendrá que desmantelar”.
Además, insisten en que “no se trata de una protesta para pedir más sueldo ni ventajas para los profesionales. Para nosotros la pérdida de población solo implicará una menor presión asistencial y quizás un reajuste de plantillas. Nuestra actividad no va a sufrir cambios, salvo en aquellos servicios que ahora ofrecemos y que al bajar de nivel tendrán que ser derivados a Torrecárdenas. En definitiva, más desplazamientos, más molestias y más esperas para los pacientes”.
Reuniones
Representantes del Sindicato Médico han solicitado mantener encuentros con los alcaldes de la comarca para “tratar el tema de la situación actual del hospital y la inquietud del personal con los recientes cambios producidos y la preocupación por la forma en que esta puede terminar repercutiendo en la atención sanitaria”. Encuentro que han tenido ya con el alcalde de Berja, José Carlos Lupión, al que han agradecido “su disposición escucharnos y estar abierto a transmitir nuestras inquietudes”.
Y, por otra parte, un colectivo afectado directamente, el de los integrantes del área de Neumología, ha decidido remitir una nota dejando a las claras sus sensaciones: “Podríamos iniciar y terminar esta nota con tres palabras: indignados, perplejos y desilusionados”, aseguran.
Y todo ello al ver que el área desaparece de la estructura organizativa y se integra en un macroservicio de Medicina Interna, lo que implicará que las decisiones las tome “una persona ajena y desconocedora de las particularidades de nuestra especialidad”.
En este sentido, cabe recordar que hay otras áreas como Medicina Tropical, Dermatología, Oftalmología y Otorrinolaringología que también se verán afectadas por los ajustes.
Recogida de firmas y posibles movilizaciones
Tras una reunión del personal facultativo del Hospital Universitario de Poniente celebrada hace unos días se acordaron las siguientes actuaciones: “Recoger firmas entre el personal del hospital para exigir a la dirección gerencia del SAS y del hospital una reunión en la que se informe al personal sobre presente y futuro de este centro”. Y, además, pedir “el reconocimiento de la estructura que poseíamos como agencia a nivel funcional”.
Finalmente, anuncian que “de no atenderse estas peticiones se pondrá en marcha un calendario de movilizaciones, que se iniciará con un paro y concentración a las puertas del hospital”.
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