La primera goleada en el Mediterráneo la firmó un equipo gallego. Era el Racing de Ferrol, como el Almería, un equipo llamado a sufrir para mantener la categoría de plata. Estaba en el banquillo Alfonsín como entrenador interino tras ser despedido Fernando Castro Santos. Luego pasó fugazmente Fabri y acabó salvando al equipo por los ‘pelos’ Paco Flores. El campo estaba de estreno y las pistas de atletismo ya eran noticia negativa para la afición. Iban al fútbol entonces unos 5.000 aficionados y aquella tarde se las prometían muy felices ya que los tres puntos daban la vida a un Almería necesitado. Nadie podía imaginar que aquel equipo iba a ponerse de sombrero el partido y acabaría siendo el primero en arrasar al Almería ante su afición.
Aquella paliza hizo que Alfonso García, que le estaba dando continuidad a Alfonsín, buscara un recambio para el banquillo y apostó por Fabri, que aguantó solo cinco partidos y todo lo arregló Paco Flores. Aquella goleada 1-6 dejó al presidente de Águilas con cara de póker ya que no era un equipo para tanto el Racing de Ferrol pero la portería de Valerio era un colador con el meta catalán vendido ante la llegada de jugadores vestidos de verde.
La estrella
El delantero cántabro Mario Bermejo, que luego sería jugador del Almería el año del ascenso con Unai Emery, aplastó con cuatro goles al equipo de Alfonsín. El primero lo hizo en el minuto 7, de penalti. Luego marcó el 0-2 a los quince para llevarse el balón en el 52’ con el 1-3. Faltaba uno más en su cuenta particular que llegó en el minuto 79 para enseñar la manita a los aficionados del Almería. Lo otros goles fueron obra de Carlos en el 69’ y 86’. El tanto rojiblanco lo anotaba Jamelli en el 46’ para poner el 1-2 momentáneo en el luminoso. Mario Bermejo acabaría volviendo al campo donde asombró con sus goles a la grada rojiblanca dando un ascenso a Primera en los buenos tiempos de Uani Emery pero no tuvo continuidad en la máxima categoría pese a que era un delantero fiable.
Bernabé García
Por aquel tiempo un árbitro de Lorca, Bernabé García, ya estaba considerado por la afición del Almería como de mal presagio pero nada tuvo que ver con la goleada, que si bien contó con errores del trencilla, también ayudó a que los rojiblancos no dieran la talla ante un rival de su Liga. Alfonsín pagó el pato de una tarde “caótica” como calificó Miguel del Pino en las páginas de LA VOZ de Almería. Aquella ‘paliza’ tuvo consecuencias para el banquillo del Almería y dio que hablar en la Segunda División en un duelo de necesitados. Tardó el Almería en pasar página de aquella derrota que tanto daño hizo para el equipo y especialmente para su entrenador. Era la primera vez que se daba un resultado tan abultado para un visitante del Mediterráneo (1-6).
Mario Bermejo aplastó al Almería.
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