Inventos, soluciones y goles: la noche mágica del Almería

LA OPINIÓN DEL PARTIDO: Vaya por delante que el partido lo gana Rubi con los cambios al descanso metiendo a Leo Baptistao que está que se sale y no solo aportando goles al equipo. Lo que le da al Almería no tiene precio porque hace mejores a los que lo rodean y se saca un pase cuando menos te lo esperas, o un cambio de ritmo que sienta al rival. Leo Baptistao 'maravillao' en un partido con sombras en la primera mitad y todo el esplendor en la segunda cuando el entrenador catalán vio el error y lo supo atajar. Quitar a Nico Melamed y Sergio Arribas no es tares fácil pero no le tembló la mano y les daba una 'culada' a ambos que andaban perdidos por el campo.

Todo lo demás era cuestión de cambiar de ritmo y para eso ya estaba en el campo un brasileño por el que no pasan los años y se muestra capaz de dar un nuevo ascenso al Almería. Con él llegaban los goles, la fiesta y la plaza de Primera que pretendía el Almería pese a la boca pequeña de su entrenador que en el ánimo de no hacer ruido a veces se pasa de prudente con el equipazo que entrena. Mucho ojo con el Almería que es una máquina de hacer goles y hasta logra dejar la portería a cero para alegría del cuerpo técnico y del vestuario.

No es lo mismo tener a Luis Suárez arriba y mandarle balones directos que poner a Leo Baptistao y se pegue un cambio de ritmo que sea medio gol. O los meta a pares como lo hizo. Firmó una segunda parte de antología y el Almería goleaba a un Córdoba rodilla en tierra viendo lo que se le venía encima con unos futbolistas que el pasado año no ganaban a nadie. La noche no pintaba bien tras una primera mitad donde Rubi cambió hasta la pelota pero en la segunda llamó a Baptistao y todo acabó en una fiesta de Primera División. Un noche feliz con muchas buenas noticias que empezaron con un cambio determinante.

Inventos

Los entrenadores saben bien lo que tienen en sus plantillas y a Rubi el vestuario ya le ofrece garantías porque lo gobierna. Ya no va cada uno a lo suyo y el que juega como el que se queda en el banquillo suma en beneficio del grupo porque el ascenso a Primera es tarea de todos, empezando por el entrenador catalán tan elogiado en sala de prensa. Es un buen gobernador de las preguntas y las respuestas. En este tiempo de felicidad hay que darle su parte del pastel del éxito pero que deje de inventar y no ponga al equipo en jaque en la primera mitad para luego devolverlo a la vida. Eso con el Córdoba te puede salir pero con un Granada lo puedes pagar muy caro. 

Soluciones

Hay partidos donde el entrenador catalán coge la libreta y experimenta. Tocaba hacer rotaciones y cambiar cosas pero duró diez minutos el efecto y el Córdoba dejaba al Almería sin lanzar a portería una sola vez. Rubi iba cambiando posiciones en el campo pero con los once elegidos no se le ganaba a un rival que se le subió a las barbas. Había que hacer algo más y puso a calentar a Leo Baptistao. Fue de lo mejor en Cartagena y le quedaban fuerzas para vivir una segunda mitad donde sus cambios de ritmo serían determinantes. Rubi arrancó la hoja de su libreta y tiró de manual para poner criterio en el campo y arropar al Pichichi con Leo Baptistao. Empezaron a llegar los goles como luego los piropos para el entrenador que decía estar "feliz por la afición más que por mí" y todo por obra y gracia de Leo Baptistao 'maravillao'.

Goles

Rubi juega con ventaja en todo lo que hace en el Almería. Primero porque cuenta con el apoyo incondicional de sus jefes. Segundo porque los pesos pesados ya gobiernan el vestuario y tercero por dirigir la mejor plantilla de Segunda División. Con la calidad que tiene en su vestuario el ascenso no se puede escapar pero es mejor que siga en su línea de no levantar la voz para que nadie se despiste en una categoría tan exigente. El partido ante el Córdoba lo ganaba él pero con la complicidad de Leo Baptistao.