La Plaza de la Catedral que ya no existe

Los niños la tomaron al asalto y la convirtieron en un inmenso patio de recreo


La calle que costearon los fruteros

La Asociación Frutera pagó el adoquinado entre la Puerta de Purchena y el Mercado Central


Tu barrio tenía himno y bandera

Existía una identidad de barrio, un carácter de patria que nos unía a los vecinos


Los juegos que estaban prohibidos

Era una gran aventura subirse a la trasera de un coche de caballos y desafiar al auriga


Amalia no llegó a ver su kiosco

La vendedora murió antes de la instalación del primer kiosco Amalia estable, en 1931


Los boniatos de los años del hambre

En 1941, Abastos intervino la cosecha de boniatos, que tanta hambre aliviaban en las casas


La calle de Calzados Garach

En agosto de 1952 se instaló en la calle las Tiendas la zapatería de Francisco Garach Espinosa


Los barrios que nacieron junto al tren

Los vecinos estaban tan habituados al ruido de los trenes que no notaban las casas estremecerse



1967: El año de los cinco hoteles

Estaban en construcción el Gran Hotel, el Indálico, el Mira-Mar, el Alcazaba y el Hairán


La esquina de ‘El Blanco y Negro’

A finales del siglo XIX la calle de las Tiendas y su entorno tenían más vida que el Paseo


Los churros de la señora Ángeles

Aprendió el oficio por necesidad, al terminar la guerra civil


El chófer del mineral y el desierto

Manuel Escobar llevaba el Land Rover con la munición en el rodaje de Lawrence de Arabia


La tienda de Roque Morales

La abrió en los años 30 en la calle Serafín hasta que en 1943 se trasladó a la calle Murcia


Los sótanos del Lido y Play Boy

Los caminos que iban a Las Perchas

La manzana del Hogar y la Bola Azul


Los muebles que duraban toda la vida

Las niñas de la fábrica de flores

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